lunes, 14 de mayo de 2007

Tiempo, Dame un Chance!

Soy un esclavo de las horas, los minutos, los segundos. Siempre apurado para todo, siempre algo que hacer. La cola, el horario de oficina, llegar a esta reunión, después a la otra, mandar esta cotización, hacer aquel pago, que si se vence la fecha del pago de la tarjeta de crédito, o ha que pagar el agua, la luz o el teléfono antes de la fecha de corte. Alguien más se siente como que si cada minuto fuese una gota de agua, en la frente, tipo tortura china?
No uso reloj, porque tengo la mala costumbre de estarlo revisando a cada rato, y desesperándome porque las agujas no corren cuando tienen que apurarse, o se apuran cuando tienen que detenerse.
Es entonces cuando me encantaría vivir sin presiones de ningún tipo, haciendo solo lo que me gusta. Sin horarios, ni agendas, planificación o razones. Solo porque me da satisfacción hacerlo.
No le temo a la edad, pero si a que el tiempo pase y no llegue a mis metas, peor aun que siga remando al lado equivocado de mi norte septentrional. Veo como se alejan el objetivo, mientras corro al lado contrario.


Alguien puede por favor ayudarme a detener el reloj? A que deje de correr? Ups. Ya pasó otro minuto, y alli van los segundos... no se detiene?

2 comentarios:

  1. Esto sonará trillado... pero la cuestión radica en que el tiempo sea tu esclavo y no que tu seas esclavo del tiempo...

    Pase lo que pase... no consigues cambiar el bio-ritmo del mundo con apurarte... tomatelo con calma. Eres joven, te queda mucho tiempo para lidiar con el tiempo.

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  2. no, no se detiene...

    gracias por la visita! ;)

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