miércoles, 26 de marzo de 2008

Porque uno Nunca Sabe lo que Tiene Hasta que lo Pierde...


Esta frase me recordó tantas cosas. Por lo sencilla y lo real que es, y lo bien que cabe en ciertos momentos. Me hizo pensar en las cosas que damos por sentadas, en esas cosas, personas, momentos de los cuales nos sentimos seguros y que muchas veces por cualquier razón no le damos la importancia suficiente.
También me hizo pensar en lo agradecido que puedo estar de cada uno de los momentos de mi vida, y como las experiencias me han ido formando en alguien del que hoy estoy orgulloso de empezar a ser. Sin cada una de esas personas, momentos, conversaciones, palabras no seriamos quienes somos hoy. Y tratamos de mejorar como especie, de buscar la manera de jamás perder esas cosas que son tan importante para nosotros.
Esa trascendencia nos hace mejores seres, más orientados hacia las aquello que realmente importa y alejándonos de las enfermedades del ego. El tiempo se nos escapa de las manos, tan rápido como querer apretar aire en nuestros puños. Nuestro apuro deja a un lado buenos amigos, buenas personas, momentos irrepetible, incluso hasta el detenernos a ver la belleza que nos rodea, en la simplicidad de una flor.
En estas letras intento empezar a aprovecharlo todo, tomarme el tiempo para disfrutarlo a plenitud. Así no perderé nunca jamás ninguna, cosa, persona o momento y tener que escuchar de nuevo esa frase repitiéndose en mi cabeza.

1 comentario:

  1. Sobre todo cuando se pierde por complacer impulsos de otros...que ahora no existen...que siguen su vida shora si con su verdadera identidad, dejando en el pasado las víctimas de su ego (o alter ego,pensador venezolano)

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