El cielo después de la lluvia, en Margarita, se pone espectacular. En los días que estuve allá un poco de negocios y otros de placer, llovió en varias ocasiones, tumbando los planes que tenía de ir a la playita todos los días. Pero como siempre hay algo positivo en lo negativo, la lluvia, me regaló estos cielos dramáticos para ser fotografiados.
Cuando si pudimos ir a la playa, nos encanta una que se llama Zaragoza. No les voy a decir donde queda porque la quiero para mi solito (jejeje) pero es una maravilla de lugar como se puede ver en las fotos. El paisaje, el silencio, la arena, me transporta cada vez que la visito.
Con tanta belleza frente a mi, no pude evitar practicar los paisajes verticales, que me gustan tanto. Es bien sencillo, todo en foco, con el wide angle y se busca detalles en el foreground, middleground y background. La idea es que las formas te vayan llevando desde el objeto que está más cerca hasta aquello que está más lejos. Pueden hacer click en las imagenes para verlas más grande.
Mi favorita sin duda es la del perro. Todas procesadas con un toque de nostlgia y añoranza, por volver a estar allí.
Tomando 3 Raws, editado en Photoshop y después en Photomatix, para darle toques finales en Lightroom y lograr esta imagen que de seguro colgaré en la pared de mi cuarto, para sentirme en esta playa siempre. By the way, feliz cumpleaños a mi (31)! Yeyyy!
Despues de dejar a mi hermano, en su congreso de Estética y Anti envejecimiento, me puse a caminar por detrás de la bahia del Hiltón, un espacio muy desolado. Ya habia visto el sitio desde lejo y me llamó muchisimo la atención dos faros, que se encuentran en el sitio y que siempre hacen buenas fotografías. Era temprano tipo 8 de la mañana y habia llovido en la madrugrada. El cielo hacia las veces de una gigantezca caja de luz, difuminando las sonras. Me tomé mi tiempo, para hacer estas fotos, aunque el hambre por no haber desayunado estaba pegando, pero lo disfrute muchisimo.
El cielo después de la lluvia, en Margarita, se pone espectacular. En los días que estuve allá un poco de negocios y otros de placer, llovió en varias ocasiones, tumbando los planes que tenía de ir a la playita todos los días. Pero como siempre hay algo positivo en lo negativo, la lluvia, me regaló estos cielos dramáticos para ser fotografiados.
